CONTEXTO GENERAL
Como lo afirma el Especialista Carlos López en sus trabajos sobre la “Administración del Siglo XXI” publicados en revistas especializadas sobre estrategia y dirección de empresas, hace tan solo unos pocos años atrás, el ambiente económico y empresarial era muy diferente al actual, dado que los mercados estaban protegidos, en muchos países y en diferentes industrias se presentaban monopolios, la tecnología era escasa y en general la competencia era muy limitada.
En nuestros días, en cambio, la economía se rige por mercados mucho más abiertos, tecnología muy desarrollada y competencia feroz. Estos aspectos obligan a que las empresas tengan que buscar formas de mantener e incrementar su competitividad; y una de estas formas, quizás la más idónea, es la materialización de Alianzas Estratégicas
Es bien sabido que las empresas son más que ellas mismas, son la suma de múltiples componentes, de proveedores, de procesos de producción, de clientes, de trabajadores, de mercadeo y hasta de su propia competencia. Aquellas que quieren mejorar sus niveles de desempeño y competitividad, son plenamente conscientes de que en el entorno en que se mueven está lo que necesitan para cumplir con sus objetivos y establecer y fortalecer sus estrategias de crecimiento.
A juicio de CATIDU, las alianzas estratégicas son coaliciones formales entre dos o más organizaciones empresariales, públicas o privadas, a fin de llevar a cabo actividades en el corto, mediano o largo plazo originadas en relaciones de oportunidad y/o permanentes y que tienen como principal objetivo el de optimizar la utilización de los recursos disponibles.
Los elementos claves que maneja CATIDU para forjar una alianza estratégica son los que define y aplica Drucker en sus teorías sobre la actividad empresarial:
1.- Ambas partes deben conocer y aceptar sus objetivos y trabajar para propiciar su compatibilidad.
2.- Ambas partes deben alcanzar un acuerdo inicial sobre todos los aspectos inherentes a la administración de la alianza estratégica.
3.- Cada parte toma medidas dentro de su propia estructura, pero las mismas son compatibles con las metas y objetivos de la alianza estratégica.
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CONTEXTO PARTICULAR
En el contexto general que se acaba de mencionar, CATIDU ha formalizado las siguientes alianzas estratégicas:
- Con la Intergremial de Transporte Profesional de Cargas –ITPC- del Uruguay, mediante la cual se accede a una instancia gremial de segundo grado al amparo de la cual se analizan y tratan de resolver los grandes problemas y asuntos vinculados al transporte de carga por carretera.
- Con el Consejo Empresarial del MERCOSUR y sus países asociados -CONDESUR-, a través de la cual se construyen los principales lineamientos y aportes que las diferentes gremiales de la región ponen a disposición de las autoridades de los países vecinos en materia de transporte internacional de cargas por carretera.
- Con la Cámara Interamericana de Transporte -CIT-, mediante la que se trabaja en los grandes asuntos vinculados a la interrelación que debe existir entre todos los modos de transporte a nivel regional e internacional, identificándose los principios generales de gestión que pueden propiciar una mejor complementación y la prestación más eficiente de toda la actividad.
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